HABLEMOS DE VIVIR HOY

Hacer el bien te llena de satisfacción. Ver triunfar a la persona que está a tu lado, llena tu corazón y tu vida de buena vibra porque querer el bienestar del otro es llenarte a ti mismo de amor. Un corazón sincero no permite que la envidia ni ningún otro mal sentimiento se apodere de ti sino que permite quitar esa maleza y quedarte con lo bueno, lo puro... te quedas con lo que realmente vale e importa en la vida Monisa

Da miedo sacarte de mi vida porque estás entrelazado en mis entrañas, y al intentar arrancarte, te llevaras parte de mi alma contigo. El amor duele cuando no es correspondido. cuando esperas lo que no llega, duele cuando los besos son fríos y los abrazos de hielo. Si no puedes amar libremente es mejor alejarse. Porque te harás más daño a ti misma, sufrirás innecesariamente, porque aunque el dolo y sentir miedo sea inevitable, quedarte para sufrir si dependerá de ti, de tu amor propio y de la calidad de vida que desees vivir. No podemos cambiar un corazón y esperar que las cosas sean iguales. No podemos imaginar que el viento soplará a tu favor si las velas siguen en la misma posición. Ama aunque duela pero libérate cuando el amor es solo tuyo. MONISA

Indudablemente que nadie es dueño de nadie. Cada uno labra su destino. Cuando permites que los demás se adueñen de tus pensamientos y tu vida, estás permitiendo  que jueguen contigo

Hay rincones que te transportan a lugares recónditos, sitios en los que jamás pensaste que podrías estar. Sin moverte vuelas y no vuelves hasta que te das cuenta o realizas que nunca saliste, solo despertaste. MONISA

Estuve     un  momento   largo detrás de la puerta, ansiosa y dudosa, imaginando lo que podría encontrar al abrirse. Como si fuera mágica, porque sin saber lo que había detrás de ella, me inspiraba felicidad y amor. Cuando finalmente se abrió aquella puerta; te vi con ella, con esa que jamás seré yo. Era un espacio tan pequeño, que se veía que solo cabían dos. Al sentir que sobraba me fui…   me fui, sin explicar nada, sin preguntar nada.  Yo solo me fui. Fue una larga espera, justo detrás de la puerta de tu corazón.